Tarjetas de visita
Desde hace unos días me preguntaba porque mi monedero se estaba poniendo gordo. No podía ser por el dinero, ya que como sabréis yo no tengo de eso. La Nerea me da mi paga semanal y con ella debo vivir hasta el lunes siguiente. Decidí abrir mi monedero y vaciarlo para ver que contenía. Sorpresa, 15 tarjetas de visita ocupaban un lugar que antes las telarañas y el aire tenían como residencia.
Vaya, de donde saldrán todos trozos de papel que solo valen para dejarte un mail y un numero de teléfono.
Tenia tres del Cervantes, dos de las ONG, dos del curro, y las otras 8 de personas que hemos ido encontrando, pero no son tarjetas que das para encontrar curro o para mantener una relación comercial con alguien. También hay tarjetas para amigos, para gente que conoces y te resulta simpática, vamos, una para cada ocasión. Yo alucino, para mi lo normal era una servilleta y un numero o un mail apuntado en ella, y eso ya era formal. Con decirlo y confiar en la memoria del otro me suelo conformar.
He decidido hacer explotar los monederos de los otros yo también y me he hecho unas tarjetitas la mar de monas, muy vacía eso si, para poder escribirles yo lo que me de la real gana.
Vaya, de donde saldrán todos trozos de papel que solo valen para dejarte un mail y un numero de teléfono.
Tenia tres del Cervantes, dos de las ONG, dos del curro, y las otras 8 de personas que hemos ido encontrando, pero no son tarjetas que das para encontrar curro o para mantener una relación comercial con alguien. También hay tarjetas para amigos, para gente que conoces y te resulta simpática, vamos, una para cada ocasión. Yo alucino, para mi lo normal era una servilleta y un numero o un mail apuntado en ella, y eso ya era formal. Con decirlo y confiar en la memoria del otro me suelo conformar.
He decidido hacer explotar los monederos de los otros yo también y me he hecho unas tarjetitas la mar de monas, muy vacía eso si, para poder escribirles yo lo que me de la real gana.
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