Para variar, por una vez
Buenos dias desde Moalboal. Por primera vez leer las noticias no se ha convetido en un valle de lagrimas y en una precipitacion de calamidades. No, no hablo de la victoria del pasado Domingo en Viena. Hablo de la liberacion de Ingrid Betancourt. Paso de analizar los detalles de la liberacion, de pretender saber si ha habido dinero de por medio o no, de buscar razones ocultas y oscuras a esto que paso ayer. Prefiero conservar el lado optimista, el lado de mi que se enternece al saber que esta señora no la hapalmado en la selva ecuatoriana a causa de la inanicion, la enfermedad o la depresion. Hacia ya unos meses que su nombre volvia a aparecer en la prensa internacional, me alegro de que vuelva a los suyos despues de tanto tiempo, y de mejor ver. Si de paso ha aprendido algo, si el cautiverio le ha servido para comprende algo no podremos decir que el sufrimiento ha sido en vano. ¿Que distancia es la apropiada para observar y juzgar mejor una situacion? ¿La lejana internet que de todo nos preserva? ¿La jungla, la guerra, los pasillos de las residencias residenciales? En cualquier caso, bienvenida señora Betancourt, a comer bien y a descansar un poco.
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