El monstruo de las pinzas de la ropa
En cada casa hay un monstruo diferente, el del armario, el del pasillo, el de debajo de la cama. A nosotros nos ha tocado uno simpático, pero algo incomodo, el monstruo de las pinzas de la ropa. No es que sea violento ni haga ruido, no, pero tiene la mala costumbre de mantener una dieta estricta a base de pinzas de la ropa. Es cierto que a parte de esa dieta, insana por ser de plástico estas, no es mal monstruo. Mucho mejor que aquel que vivía debajo de la cama y disfrutaba dándonos las noches. Incluso mejor que el del pasillo que prefería hacer ruido y dejar charcos de agua para que nos resbaláramos.
Pero he de reconocer que cada vez que subo a tender me doy cuenta que ya no puedo poner 8 camisetas como antes, sino tan solo 6, y si al cabo de varios días vuelvo a poner otra lavadora, oooh sorpresa. Ahora tan solo 5 camisetas….
Si alguien conoce un tratamiento para nuestro monstruo le estaría agradecido. Sino, seguiremos comprándole pinzas, siempre de plástico y de preferencia verdes, las otras le repiten, e intentando que cambie la dieta de pinzas de plástico verdes por una de mosquitos nocturnos, mucho mas sana y beneficiosa para nosotros.
Pero he de reconocer que cada vez que subo a tender me doy cuenta que ya no puedo poner 8 camisetas como antes, sino tan solo 6, y si al cabo de varios días vuelvo a poner otra lavadora, oooh sorpresa. Ahora tan solo 5 camisetas….
Si alguien conoce un tratamiento para nuestro monstruo le estaría agradecido. Sino, seguiremos comprándole pinzas, siempre de plástico y de preferencia verdes, las otras le repiten, e intentando que cambie la dieta de pinzas de plástico verdes por una de mosquitos nocturnos, mucho mas sana y beneficiosa para nosotros.
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